La medida es resultado del reclamo de una madre cuyo hijo murió de una sobredosis de opioides en la Línea Azul.
El Chicago Hispano
Una máquina expendedora ofrecerá gratis el medicamento Narcan en la estación de la Línea Roja de CTA ubicada en la calle 95, en Roseland, con el fin de ayudar en un programa piloto a las personas que sufren una sobredosis de drogas.
Este es el más reciente esfuerzo para aumentar el acceso al fármaco Narcan. La medida es resultado del reclamo de una madre cuyo hijo murió de una sobredosis de opioides en la Línea Azul, indica un reporte del medio periodístico Block Club Chicago.
Anna Dolezal, portavoz del departamento de salud de la ciudad, confirmó que en el condado de Cook más personas se han visto afectadas por sobredosis de opioides que por accidentes automovilísticos y violencia armada combinados en los últimos años.
“Al menos 1,981 personas murieron por sobredosis de opioides en 2022, con 78 autopsias aún pendientes, lo que marcó trágicamente un nuevo récord”, dijo por su parte Brittany Hill, portavoz de la oficina del médico forense.
La máquina expendedora gratuita de la parada 95 también contará con tiras reactivas de fentanilo y kits de higiene. La medida se produce en medio de un impulso nacional para ampliar el acceso a Narcan, el medicamento que puede revertir las sobredosis.
El mes pasado, la Administración de Alimentos y Medicamentos aprobó la venta sin receta del primer aerosol nasal Narcan, que se espera esté disponible en Chicago en los próximos meses, dijo la Dra. Wilnise Jasmin, directora médica del departamento de salud de la ciudad.
Por lo pronto, las agencias de servicios sociales contratadas por la CTA también ofrecen el medicamento. “Nuestro personal ha administrado Narcan, en algunos casos, a clientes en las estaciones”, dijo Burke Patton, vocero del Ministerio Nocturno, una de las agencias utilizadas por el servicio de transporte.
Miles de kits de Narcan también están disponibles de forma gratuita en las bibliotecas de la ciudad, con bibliotecarios capacitados para usarlos. El año pasado se lanzó una línea de ayuda directa para conectar el mismo día que llaman el transporte hacia y desde clínicas y farmacias, dijo Dolezal.
Sin embargo, el acceso a Narcan aún es limitado en los espacios públicos a medida que aumentan las muertes diarias. Algunos activistas entrevistados dijeron a Block Club que el próximo paso debería ser distribuir el medicamento en todas las estaciones de CTA, así como gasolineras y aeropuertos.
“La gente muere por sobredosis todos los días. Tiene que haber un sentido de urgencia en torno a esto como lo hubo con COVID y con la violencia armada”, dijo Chelsea Laliberte, cofundadora de la Coalición de Recuperación y Reducción de Daños de Illinois, quien perdió a su hermano a causa de la adicción.
Sheila Haennicke, madre de David, el joven de 29 años que murió de una sobredosis en la Línea Azul en 2021, relató a Block Club Chicago que su hijo tenía consigo un boleto, dos bolsitas de polvo blanco y un paquete de Narcan, como ayuda contra una sobredosis.
“Sufrió durante mucho tiempo adicción a los opiáceos y probó la rehabilitación más de una docena de veces, pero estaba atrapado en las garras de drogas poderosas”, dijo. El joven llevaba Narcan en caso de que alguna vez lo necesitara, pero cuando así sucedió nadie respondió rápido para administrarlo.
En los años posteriores a su muerte, su madre buscó presionar a la CTA, escribió cartas y escuchó la promesa de aumentar el acceso y capacitación sobre el medicamento. “La máquina expendedora es un paso muy positivo, pero la respuesta se ha retrasado por la burocracia y otros problemas”, consideró.
Haennicke dijo que lleva Narcan a donde quiera que va “es algo que hago para sobrellevar la situación, pero también para expresar humanidad. Es como si vieras a alguien sangrando, le ofrecerías una curita”. Triton College creó una beca en honor a David Haennicke, quien estudió allí para ser paramédico.
Muchos pacientes que tienen problemas con los opioides, presentan adicciones que se desencadenan por traumas relacionados con el abuso infantil, la violencia doméstica, la depresión y enfermedades crónicas que primero los llevan a usar analgésicos.
La crisis de los opiáceos se ha visto agravada por el fentanilo, un opiáceo sintético que combina muchas drogas y ha causado su daño más grave en el West Side de Chicago, y la xilazina, un sedante para animales, introducido en el suministro de medicamentos, que mató a 121 personas en 2022, dijo Dolezal.