Los conductores latinos son detenidos el doble de veces que los blancos, asegura una demanda presentada por la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU).
La demanda afirma que hay “un patrón racialmente sesgado” en cómo la policía de Chicago hace cumplir las leyes de tránsito en los lados sur y oeste de la ciudad, por razones menores o sin ninguna razón, lo que sirve como herramienta para registrar y detener a conductores y pasajeros, según reporte del Sun Times. Los conductores afros y latinos son objeto de paradas de tráfico con prejuicios raciales, precisa la demanda de la ACLU. Incluso cita correos electrónicos del Departamento de Policía de Chicago (CPD) que muestran a sus líderes pidiendo más paradas de tráfico como estrategia de lucha contra el crimen.
De acuerdo con los datos de registros de CPD, cada año desde 2017, casi dos tercios de los conductores detenidos son afros, el 20 % son latinos y el 12 % son blancos, aunque el porcentaje de la población en edad de conducir es aproximadamente el mismo.
De las 600,000 detenciones realizadas en un año por los oficiales de CPD menos del 1% resultaron en un arresto o el descubrimiento de drogas ilegales o un arma, “pero las detenciones frecuentes causan daños graves a la fe de las minorías de Chicago en la policía”, dice la demanda.
Una encuesta de 2023 citada en el documento mostró que más de una cuarta parte de los encuestados afroestadounidenses informaron haber estado en un automóvil detenido por la policía en el último año, frente al 11% de los latinos y el 7% de los blancos.
Uno de los cinco demandantes, José Ma- nuel Almanza Jr., activista comunitario en La Villita, de 35 años, expresa en la demanda que ha sido detenido en su automóvil una docena de veces solo desde 2021, y con más frecuencia mientras conducía cuando era adolescente y tenía 20 años.