Redacción El Chicago Hispano
Continuando con la tradición, que comenzó hace más de 100 años, el barco navideño Mackinaw llegó el viernes 6 de diciembre a la ciudad con más de 1,200 pinos para familias necesitadas. La nave, bajo la dirección de la Guardia Costera de Estados Unidos, atracó en Navy Pier.
El buque de 240 pies de largo traía en la proa los cientos de arbolitos de Navidad que la tripulación empezó a descargar. Después se realizó una ceremonia oficial de recibimiento de los visitantes y los pinos.
Los árboles de Navidad se entregarán en las viviendas de las familias de bajos ingresos de Chicago, con el fin de alegrar los hogares durante esta temporada de fiesta. La organización sin fines de lucro Ada S. McKinley Community Services participa en esta acción desde hace más de una década.
El grupo de South Side, que es el socio logístico del evento navideño, preparó camiones para recibir los árboles descargados del barco, que más tarde entregaría en las comunidades necesitadas.
En el evento se repartió un comunicado de Ada S. McKinley Community Services, en el que se destacó el valor de esta acción: “Se trata de un beneficio para todos y no hay ningún costo para ninguna familia. Es una tradición navideña realmente alegre y conmovedora”.
Jamal Malone, directora ejecutiva de la organización, explicó en el texto que los pinos de obsequio “simbolizan el valor de la familia y la comunidad”. “Nuestros esfuerzos colectivos representan el amor, el cuidado y la compasión de los voluntarios mientras traen alegría a los vecindarios de Chicago”.
La tradición de entregar árboles de Navidad a familias necesitadas en Chicago empezó hace más de un siglo, cuando el buque navideño original “Rouse Simmons” transportaba hasta 5,000 árboles. El 23 de noviembre de 1912 el barco y su tripulación se perdieron durante un vendaval.
Desde hace 25 años, la Guardia Costera de Estados Unidos reproduce la tradición cada año de traer a Chicago alegría navideña, honrando la misión de la tripulación de la antigua nave. La presencia del barco incluye visitas públicas gratuitas a su interior.
Cuando Mackinaw termina de repartir los más de mil árboles a las familias de Chicago se dedica a cumplir diversas funciones en el Medio Oeste, como dar servicio a las boyas que indican aguas poco profundas, romper el hielo para que los barcos viajen de forma segura en invierno y mantener a salvo a navegantes.
