Redacción El Chicago Hispano

La Convención Nacional Demócrata 2024 superó las expectativas. Durante una semana, en un ambiente de libre expresión, Chicago brilló como ciudad anfitriona alejada de la violencia policial del pasado, con la promoción de políticos locales y la participación de residentes en una fiesta alrededor de la candidata nominada, Kamala Harris.

Al final del megaevento político, el alcalde Brandon Johnson expresó satisfecho: “Hemos cumplido, logramos la mejor convención que el mundo haya visto jamás”. Dijo que la CND24 “elevó la reputación de la ciudad y, en lo que respecta al mundo, está claro que la gente volvió a enamorarse de Chicago”.

La policía y los vecinos crearon “una convención segura, vibrante y emocionante”, aseguró Johnson. El alcalde confió en que se podrá aprovechar ese impulso para generar más inversiones en la ciudad.

Pese a los intentos de disturbios, el temor a la presencia de actos violentos desapareció después de la respuesta firme de la policía de Chicago para frenar con arrestos algunas de los excesos de los manifestantes y mantener el orden alrededor de los perímetros de las dos sedes del evento.

Johnson consideró un éxito del Departamento de Policía de Chicago la ausencia de conflictos durante la semana en un evento ordenado. “Si la convención de 1968 pasó a la historia como el ejemplo de brutalidad policial, entonces la convención de 2024 pasará como ejemplo de vigilancia constitucional”, dijo.

El alcalde aprovechó al máximo la oportunidad de elevar su imagen como político, al igual que el gobernador de Illinois, J.B. Pritzker, quien además de pronunciar un discurso en horario de máxima audiencia, participó en desayunos de la delegación estatal, paneles, entrevistas, fiestas y conciertos nocturnos.

La convención fue una victoria también para el gobernador, a quien se le reconoció el esfuerzo para traer a Illinois el evento.  Al final de la semana, Pritzker incluso insinuó que presionará para ser anfitrión de la Convención Nacional Demócrata nuevamente en 2028.

Después de un año de preparación, la fecha del evento llegó arrastrando el recuerdo de la convención de 1968, celebrada también en Chicago, que acabó en violentos enfrentamientos entre la policía y manifestantes que protestaban por la guerra de Vietnam.

En la CND24, la ciudad hizo todo lo posible por garantizar seguridad a visitantes y residentes sin afectar la libertad de expresión de grupos que anunciaron marchas y mítines de protesta de más de 50,000 personas con diferentes temas, de los cuales la guerra en Gaza era el principal.

Los manifestantes tuvieron dos sitios para sus mítines cercanos a las sedes de la convención, vías adecuadas para sus marchas y la disposición de la policía para protegerlas. Durante dos días las protestas se desarrollaron en forma pacífica, pero el martes 20 hubo un intento de enfrentamiento que terminó en arrestos masivos.

Los manifestantes propalestinos atacaron a los oficiales cerca del consulado israelí, en el centro de la ciudad, arrojando carteles e insultando a las mujeres policías. La respuesta fue el arresto de 59 personas, dos de las cuales fueron trasladadas al hospital para atender lesiones menores.

“Declaramos un arresto masivo después de que nuestros oficiales fueran confrontados y atacados físicamente”, informó el superintendente de la policía de Chicago, Larry Snelling. A partir de ese día no hubo mayores incidentes en las manifestaciones, que se desarrollaron de manera pacífica,

El reporte de Snelling al terminar la convención fue de 74 arrestos relacionados con las protestas, incluyendo a tres periodistas, con tan solo ocho o nueve quejas contra los oficiales, así como cuatro personas que resultaron heridas en las marchas y mítines, que necesitaron ser hospitalizadas.

Sólo un hombre de 33 años fue acusado de un delito grave y enfrenta un cargo de resistencia a un agente de policía causando lesiones. Hubo 11 acusados de delitos menores, principalmente por resistirse a la policía, y el resto de arrestados recibieron citaciones por alteración del orden público, no dispersarse y no obedecer a la policía.

Una manifestación pacífica contra la ocupación de Gaza al interior de una sede, realizada por delegados no comprometidos, y el disparo aislado a un hombre en un restaurante donde comían  otros delegados fueron parte de las noticias alrededor de la convención.

La fiesta de Chicago

Con la ayuda de un clima perfecto y relativamente pocos problemas logísticos, visitantes y residentes disfrutaron de alguna forma de las actividades planeadas en la ciudad alrededor de la Convención Nacional Demócrata 2024.

Aun cuando la afluencia de forasteros no significó ganancias inesperadas para todas las pequeñas empresas y los vecindarios, como prometió el comité anfitrión, los residentes de Chicago se beneficiaron con los cuatro días de fiesta organizados, sin padecer por las manifestaciones y cierres de tránsito.

Además de los negocios céntricos mayormente beneficiados con ganancias, los que participaron en la feria de vendedores de cuatro días llamada “DemPalooza” en McCormick Place reportaron numerosas ventas y promesas de contratos. La inscripción al evento fue gratuita y abierta al público.

Con talleres, diversas actividades y la oportunidad de comprar en comercios de Chicago, el evento concentró a varias pequeñas empresas que ofrecieron manicura, objetos y ropa inspiradas en Kamala Harris, dentro de la temática de la convención que tuvo el propósito de acercar a los votantes.

En especial, la CND24 fue buena para la venta de camisetas,  con una oferta variada por la presencia de vendedores que viajaron a Chicago desde todo el país para vender su mercancía no oficial, no autorizada, pero muy creativa, con el rostro de Kamala Harris, referencias a la candidata y frases divertidas.

Más de 75 vendedores del área de Chicago, desde fabricantes de velas y cafeterías hasta el Acuario Shedd y el Museo de Escritores Estadounidenses, estuvieron en McCormick Place para mostrar a propios y extraños diversas ofertas económicas y culturales de la ciudad, según informó el comité anfitrión.

Vecindarios cercanos a las sedes recibieron remodelaciones de sus calles, con pintado de edificios, arreglo de estacionamientos  y canchas de baloncesto, e incluso colgado de macetas de los postes de luz, así como la tranquilidad y confianza en la que vivieron en el tiempo que duraron los perímetros de seguridad.

En general, Chicago disfrutó en paz de la gran fiesta, y los organizadores consideraron que su buen desarrollo impulsará el turismo futuro, incluso, si el resultado económico prometido a los negocios locales y comunidades no se materializó como se esperaba.