Redacción El Chicago Hispano

A más de un año de su aprobación, aún no se establece el programa piloto Smart Streets para multas automáticas a los conductores que bloqueen los carriles de bicicletas y autobuses en el centro de la ciudad, lo que podría suceder en otoño, según funcionarios.

El programa, aprobado en marzo de 2023 por el Concilio Municipal,  exige el uso de cámaras de la ciudad para detectar y multar a los conductores estacionados ilegalmente en carriles para bicicletas y autobuses, paradas de CTA, así como cruces peatonales o zonas de carga.

De acuerdo con la ordenanza, las multas deberán enviarse por correo a los conductores captados por las cámaras violando la disposición legal. Para ello se instalará la videovigilancia en el transporte público, los vehículos de la ciudad, los postes de luz y otras propiedades seleccionadas por el ayuntamiento.

Los infractores grabados por las cámaras recibirían una carta de advertencia antes de que el Departamento de Finanzas les emita una multa. El área que abarcará el piloto para la emisión de multas se extenderá desde el Lago Michigan hasta Ashland Avenue y desdeNorth Avenue hasta Roosevelt Road.

Según los concejales del Comité de Seguridad Vial y de Peatones del Concilio Municipal, el programa aún no entra en operación debido a que el Departamento de Transporte de Chicago no ha logrado encontrar un proveedor adecuado para la tecnología que se requiere instalar.

Debido al retraso en su aplicación, en una audiencia del comité mencionado se acordó otorgar una extensión a su vigencia de dos años, por lo que el tiempo de duración correrá desde el momento en que se emita la primera multa. La fecha original de finalización del piloto era el 30 de junio de 2025.

Además de la extensión del piloto, en la reunión del comité se presentó una enmienda para incluir las infracciones de los parquímetros del centro de la ciudad en la aplicación automática de la ley, como una ordenanza de “remolque”. Ambos agregados aún necesitan la aprobación final del pleno del Concejo.

Funcionarios de la agencia local no dieron una fecha exacta para el inicio del programa piloto Smart Streets, pero confiaron en que será en el otoño próximo. En cuanto al monto de las multas, el año pasado aumentó de $159 a $250 la sanción a vehículos que bloqueen un carril de ciclistas.

Cada conductor infractor recibirá una notificación de advertencia antes de ser multado, y la multa le llegará a su buzón después de 30 días de su registro. La medida tuvo una amplia aceptación de los concejales e, incluso, varios de ellos propusieron extenderla a otras áreas de la ciudad.

La expansión de la videovigilancia al centro de la ciudad y la emisión automática de multas que autorizó el ayuntamiento hace mas de un año tienen el propósito de “hacer que las calles del centro de la ciudad sean más seguras para los peatones y ciclistas”, según la ordenanza.