Como resultado de esta determinación, El Milagro se verá compelido a llevar a cabo una serie de acciones específicas, con el fin de restituir los derechos laborales que habían sido desatendidos
Los empleados de la fábrica de tortillas El Milagro lograron un acuerdo legal con la empresa, el cual los protege del acoso y las represalias por quejarse de las condiciones laborales, informó Pedro Manzanares, trabajador de la tortillería, en una conferencia de prensa realizada afuera de la planta de La Villita.
Con el acuerdo mencionado se resolvió una queja presentada en marzo contra la empresa por la Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB), agencia federal independiente que protege los derechos de los empleados en el sector privado.
En la denuncia se citaron evidencias de amenazas que realizó la empresa a los trabajadores si continuaban organizándose, como el despido, el cierre de plantas, la pérdida de vacaciones y otros beneficios.
EL DERECHO DE LOS EMPLEADOS A FORMAR UN SINDICATO
Según el acuerdo, la compañía aceptó no interferir ni penalizar a los trabajadores que se organicen para obtener mejores salarios o trato. Además, El Milagro publicará avisos en los lugares de trabajo respaldando el derecho de sus empleados a formar un sindicato.
El acuerdo es resultado de una defensa por los derechos de los trabajadores realizada durante dos años con la asesoría de la organización Arise Chicago y que generó mejoras notables, como salarios más altos, el fin de una semana laboral ilegal de siete días, e incluso, la dotación de herramientas de trabajo, dijo Manzanares.
Sin embargo, El Milagro no reconoce la intervención de la organización Arise Chicago, a la cual califica de un grupo de “agitadores externos”. Asegura que las recientes mejoras en los salarios y las condiciones laborales se derivan del acercamiento de la empresa a los trabajadores y no de la presión externa.
POLÍTICA DE PUERTAS ABIERTAS
Manzanares mencionó que en el proceso de disputa, el cual duró dos años, la empresa gastó casi $1.8 millones para frustrar la organización de los trabajadores.
“La compañía respondió a nuestros esfuerzos tratando de desanimarnos, silenciarnos, gastando una asombrosa cantidad para cerrarnos”, dijo.
Mientras que El Milagro expresó en un comunicado: “Nuestra empresa tiene una política de puertas abiertas para atender cualquier inquietud de los empleados y actuamos en consecuencia. Esta política refleja nuestros valores y compromiso con la mejora continua en el lugar de trabajo”.
Para concluir, es importante subrayar que la tortillería tiene alrededor de 450 trabajadores en tres plantas ubicadas en los vecindarios de La Villita, Brighton Park y el Lower West Side. A la fecha, los trabajadores no están afiliados a un sindicato y no han presentado alguna solicitud de afiliación sindical.