Las producciones cinematográficas y televisivas de Chicago se detuvieron debido a la huelga de actores y escritores por los bajos salarios, la falta de transparencia y el manejo de la inteligencia artificial.
SAG-AFTRA, el sindicato que representa a los actores de cine y televisión, anunció que se uniría al Sindicato de Escritores de América en una huelga conjunta contra la Alianza de Productores de Cine y Televisión. Esta es la primera huelga que comparten ambos gremios en 60 años.
Aún cuando el problema laboral se originó en Los Ángeles y Nueva York, la industria del cine y la televisión en Chicago también resultó afectada, ya que producciones como “Chicago Med”, “Chicago PD”, y “The Chi” dejaron de filmarse hasta que se resuelva la huelga.
Los gremios de escritores y de actores exigen una compensación más justa por su trabajo, más protecciones para los creativos, en un panorama en el que los programas de transmisión funcionan en temporadas más cortas durante períodos de tiempo más largos, y contra la amenaza de remplazar su trabajo con inteligencia artificial.
Los miembros y simpatizantes del sindicato SAG-AFTRA realizaron una caminata desde Wrigley Square, en Millennium Park, hasta Buckingham Fountain, en Grant Park, donde llevaron a cabo una manifestación de protesta.
Entre los asistentes, el actor local Courtney Rioux dijo a la prensa que quienes trabajaron en programas que actualmente se transmiten no pueden pagar sus facturas, ni su alquiler, debido a que “los ejecutivos del estudio han hecho cada vez más difícil ganarse la vida en esta industria”.
El presidente de SAG-AFTRA, Fran Drescher, aseguró que el sindicato está preparado para llevar a cabo un paro de labores por varios meses, una acción difícil pero que significa luchar no solo por corregir condiciones laborales, sino por la defensa de una profesión.
La huelga afecta a los actores y escritores de Chicago, pero tambiėn a las producciones de cine y televisión de la ciudad que dependen de los comerciantes para construir decorados, manipular la iluminación y realizar el trabajo técnico diario necesario para la filmación, lo que significa toda una cadena económica en riesgo