Un número creciente de Consejos Escolares Locales se oponen al plan de las Escuelas Públicas de Chicago (CPS) de iniciar en enero el regreso de los estudiantes a los edificios escolares. Se prevé el retorno de los niños de preescolar y educación especial el 4 de enero, mientras a las escuelas elementales el 25 de enero.
El plan de reapertura mantiene en la incertidumbre a los padres de familia de los estudiantes de CPS debido a las disputas sindicales y el recrudecimiento de la pandemia de coronavirus en el estado, de acuerdo con reportes periodísticos. Las escuelas de Illinois han contabilizado más de 160 brotes de COVID-19.
El regreso es voluntario y más de 77,000 estudiantes han optado por reintegrarse a las aulas en persona, aproximadamente 1 de cada 3 que eran elegibles, según CPS. Pero en las últimas semanas se han sumado más consejos escolares locales que se oponen al plan de comenzar el regreso en el nuevo año con los estudiantes más jóvenes y de educación especial.
La Junta de Relaciones Laborales Educativas de Illinois denegó este mes la solicitud del Sindicato de Maestros de Chicago de emprender acciones legales que detuvieran el plan. No obstante, se programó una audiencia con un juez de derecho administrativo para fines de enero, que el sindicato busca mover para antes de la reapertura del primer grupo de escuelas.
Los padres de familia en favor del plan consideran que el regreso a las escuelas ayudaría a las comunidades a reforzar la batalla contra el coronavirus, y rechazan la disputa entre líderes sindicales y funcionarios del distrito escolar.
Algunos padres que han decidido seguir con el aprendizaje a distancia argumentan la oportunidad que tendrán los maestros de centrar su atención en el aula en los estudiantes que más lo necesitan. Mientras que los maestros destacan en contra del regreso el esfuerzo realizado para ofrecer una educación remota de calidad y la seguridad sanitaria.
Una encuesta de CPS sobre la opción de regresar a las escuelas mostró la tasa más alta en favor entre los estudiantes blancos, del 67%, seguidos por el 55% de estudiantes multirraciales, el 34% para afro-estadounidenses, 33% asiáticos y 31% latinos. Los estudiantes con planes de educación especial mostraron una tasa de 36%, y los económicamente desfavorecidos de 32%.