Con esta medida, buscan facilitar el acceso de los inmigrantes recién llegados a los servicios a la ciudad y en su integración a la nueva vida
Chicago abrió el acceso a identificaciones para los inmigrantes que permanecen en la ciudad, las cuales facilitan su movilidad e integración en su nueva vida, a través del Ayuntamiento Móvil (Mobile City Hall), un servicio que funciona desde 2018 con ocho eventos al mes.
La Secretaría Municipal, en asociación con varios departamentos de la ciudad y oficinas de concejales, acerca a los vecindarios algunos trámites como la compra de calcomanías para vehículos, permisos de estacionamiento, licencias para perros e identificaciones personales (City Key).
El Ayuntamiento Móvil consiste en ventanas emergentes que limitan los eventos a la atención de 250 personas. Sin embargo, desde el inicio de la afluen- cia de inmigrantes, en agosto pasado, se incrementó la asistencia y en algunos días se han llegado a presentar hasta 400 personas, de acuerdo con información de la agencia local.
Chicago emite las identificaciones a cierto grupo de residentes para su uso en trámites menores, como inscripción en bibliotecas, compra venta, entre otros. A los inmigrantes el documento les proporciona seguridad en su adaptación a la ciudad, e incluso, les sirve en el uso del servicio bancario y la búsqueda de vivienda.
La asistencia numerosa de inmigrantes, quienes en tres ocasiones acamparon en el sitio, ha provocado molestia entre vecinos, sin embargo, la cooperación con la policía y asignación de más personal impide aglomeraciones y daños en los parques, según la oficina de la secretaría.
Desde agosto pasado, más de 10,500 solicitantes de asilo, en su mayoría procedentes de Venezuela, llegaron a Chicago. De ellos, cerca de 4,500 personas se alojan en refugios temporales de la ciudad y más de 600 esperan en las comisarías de policía a que haya espacio disponible.
En este contexto, la ciudad tiene saturados los ocho refugios temporales que administra, además de que están en proceso de ocupación dos colegios comunitarios y construcciones en parques, lo que desalojaría las estaciones de policía.
Hasta ahora, la estrategia del alcalde Brandon Johnson para manejar la situación de los inmigrantes se enfoca en trasladar a las familias que duermen en las comisarías a grandes espacios en la red de colegios comunitarios de la ciudad, un plan que se sigue posponiendo.